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Mercado de repuestos automotrices
El lavado de coches tradicional a alta presión consume grandes volúmenes de agua: aproximadamente entre 100 y 200 litros por vehículo. Este consumo excesivo resulta insostenible ante la creciente escasez mundial de agua.
Las aguas residuales del lavado tradicional contienen contaminantes como lodo, aceite y detergentes. Sin un tratamiento adecuado, estos contaminantes dañan los ecosistemas.
Las manchas difíciles suelen requerir chorros de agua a alta presión o productos químicos agresivos, que pueden no eliminar completamente la suciedad, además de rayar la pintura y acelerar su desgaste. El agua a alta presión también puede filtrarse en los componentes electrónicos, provocando averías y reduciendo la vida útil del vehículo.






El limpiador de vapor eléctrico es una máquina especializada diseñada para la limpieza profunda de equipos industriales, incluyendo maquinaria, componentes, moldes y tuberías. Utiliza vapor a alta temperatura y presión para disolver eficazmente aceite, polvo, óxido y bacterias.
Utiliza solo de 1 a 5 litros por sesión de limpieza (en comparación con los 100 a 150 litros de los métodos tradicionales), lo que reduce el consumo anual de agua en más del 95%.
Nos dedicamos a la fabricación de equipos de limpieza industrial fiables y personalizados, y ofrecemos servicios OEM/ODM para satisfacer sus necesidades.